domingo, 17 de mayo de 2009

2do año de Estancias Posdoctorales (conv 2009)

Recién se publicaron las instrucciones para quienes están interesados en solicitar el segundo año de Estancia Posdoctoral, habiéndoseles asignado ya -naturalmente- un año en la convocatoria pasada, como puede consultarse aquí.
Son elegibles quienes:
Tengan vigente la beca para realizar su primer año de estancia posdoctoral en México y que ésta concluya en el periodo comprendido entre los meses de junio - noviembre de 2009.
Sean aceptados para realizar un 2do año de estancia por el mismo Posgrado Receptor donde se llevó a cabo el 1er año.
Se dediquen tiempo completo a la estancia
No cuenten con beneficio personal de tipo económico o en especie, otorgado con motivo de otra beca o relación laboral vigente con permiso, comisión o licencia que permita la percepción de sueldo o salario al momento de recibir la beca y durante el tiempo que ésta dure.
No hayan recibido apoyo del CONACYT para la realización de un 2do año de estancia posdoctoral.
De acuerdo con el calendario establecido por el CONACYT, las solicitudes podrán ingresarse entre el 15 y el 29 de mayo, y pueden esperarse resultados para el 27 de junio, esperándose que los nuevos periodos de estancia inicien entre julio y noviembre.
El procedimiento a seguir, para los interesados en participar en posgrados con sede en Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, para solicitar este beneficio será el siguiente:
I. El Aspirante al apoyo y el Responsable del Proyecto Académico deberán dar de alta o actualizar, su Currículum Vitae Único (CVU).
II. Lllenar y escanear (en archivos pdf no mayores a 2mb) los siguientes formatos, requeridos por CONACYT en los términos de referencia de la convocatoria.:
1) Carta de aceptación firmada por el Coordinador del Posgrado Receptor y con Visto Bueno del Responsable del Proyecto Académico
2) Informe académico final de su 1er año de trabajo o avance hasta la fecha
Contar con Números de CVU del interesado y el responsable del proyecto académico en todo momento.
III. Será menester ponerse en contacto con la Oficina de Becas CONACYT de la Facultad de Filosofía y Letras para conciliar una cita para ingresar la solicitud al sistema.
Adicionalmente, deberán traer el siguiente formulario completo en formato word:

1. Solicito una:
a)Estancia sabática anual, b)estancia sabática semestral, c)estancia posdoctoral
2. ¿El Aspirante obtuvo anteriormente un apoyo del CONACYT para realizar una estancia posdoctoral?:
sí / no
3. ¿Para la realización de la estancia, el aspirante debe cambiar su lugar de residencia?
sí / no
4. Fecha de inicio de estancia (debe ser el primer día del mes en cuestión):
5. Lugar físico donde se realizará la estancia (Institución, área, dependencia, dirección postal y teléfono con clave de larga distancia):
6. Datos del programa de doctorado donde el aspirante obtuvo el grado:
¿El Posgrado tiene registro vigente en el PNPC? Sí / No
Fecha de obtención de grado:
Nombre del programa que otorgó el grado:
7. CVU del responsable del proyecto para estancias posdoctorales o bien del coordinador de posgrado, para estancias sabáticas:
8. Recordar que para el rubro de anexos sólo se aceptan documentos en formato "PDF" con un tamaño no mayor a "2 MB". El nombre del archivo debe tener un máximo de "8 caracteres" y su extensión PDF. Utilizar solamente caracteres alfanuméricos.
9. Los siguientes datos respecto al proyecto:
1 Título: (Puede contener un máximo de 150 caracteres)
2 Resumen: (Puede contener un máximo de 4 párrafos con 255 caracteres cada uno)
3 Palabras claves: (Deben conformar como máximo tres grupos de palabras separados por coma, en un máximo de 100 caracteres en total).
4 Objetivos y metas: (Puede contener un máximo de 4 párrafos con 255 caracteres cada uno).
5 Avances y/o antecedentes: (Puede contener un máximo de 8 párrafos con 255 caracteres cada uno).
6 Justificación: (Puede contener un máximo de 4 párrafos con 255 caracteres cada uno).
7 Metodología: (Puede contener un máximo de 4 párrafos con 255 caracteres cada uno)
8 Para el caso que el proyecto académico propuesto cuente o requiera de otros recursos financieros, favor de especificarlos: (Puede contener un máximo de 4 párrafos con 255 caracteres cada uno).
9 Describir cómo se inserta la propuesta en el Posgrado receptor para el fortalecimiento de su calidad: (*) (Puede contener un máximo de 4 párrafos con 255 caracteres cada uno)
10 Especificar el compromiso de la Institución Receptora en infraestructura para el desarrollo de la estancia: (Puede contener un máximo de 4 párrafos con 255 caracteres cada uno).
11 Cronograma general de las actividades a desarrollar en la estancia: (Máximo 30 actividades)
Actividad: Máximo 30 caracteres
Fecha de inicio (día/mes/año)
Fecha de término (día/mes/año)
Productos esperados Máximo100 caracteres
Impacto en el posgrado receptor (*) Máximo 100 caracteres

lunes, 11 de mayo de 2009

Asuntos Porcinos

Como dije alguna vez, es justo dar foro a las inquietudes de la comunidad.
He seleccionado uno de los cientos de correos que llegan a mi bandeja con información al respecto. Se trata del punto de vista de una Becaria de nuestra Facultad, en adelante es ella quien habla al respecto:


La producción de carne en las granjas industriales: Infiernos horribles de puercos, vacas y pollos, encima unos a otros, viviendo en su propio estiércol, sin ver la luz del día o respirar el aire fresco, algunos ya muy enfermos, hasta con heridas abiertas y pus, infectándose entre ellos, alimentados con carne hasta si son herbivoros, ni hablar de alimentados de su propio especie, es decir: canibalismo y hasta alimentados con estiércol y todo lo demás que caiga en el piso en estos "granjas" que realmente son fábricas, inyectados de hormonas y antibióticos: Estos lugares proveen el caldo de cultivo ideal para estas nuevas mutaciones de virus. Hay tres empresas corporativas gigantes que controlan casi toda la producción de carne en TODO EL MUNDO. Su meta mientras compran y hacen que los grandes compradores como McDonalds boicoteen a los ranchos y granjas independientes, locales y tradiconales es hacer la producción de carne el más barato posible (a través de estas condiciones inhumanas para los animales y de explotar a los trabajadores y los que viven cerca de estos lugares de pesadilla) y ganar tanta capital como las empresas petroleras, y básicamente vivir por encima de la ley. ¿Les importa que tal vez eliminen la mitad de la raza humana con la influenza? ¡¡NO!! ¡¡Porque queremos nuestra carne y la queremos BARATA!!por favor, revisen estes enlaces (las cuales he pegado abajo):Este que habla de los orígenes probables de este virus:
Y éste habla de como obviamente la grande industria cárnica les dijo a todos que se callaran acerca del asunto y que dejaran de llamarlo virus porcino porque ellos son innocentes, ¿verdad? Ellos no tenían nada que ver con este virus. Está en inglés, así que los que no pueden leer bien el inglés, les pongo las citas más relevantes abajo:
Así que me preguntan: ¿Qué podemos hacer, Wendy?POR FAVOR, BOICOTEEN CARNE PRODUCIDA EN ESTAS GRANJAS INDUSTRIALES, especialmente, SMITHFIELDS y TYSON. Esto incluye la comida rápida y la carne que se compra en el supermercado. COMPREN (aunque te cueste unos pesos más) CARNE PRODUCIDA LOCALMENTE, DE PASTO ABIERTO, DE RANCHEROS INDEPENDIENTES, se puede encontrar más bien en el tianguis directo de los productores que cuidan mejor a una carne más sanay ecológica o en algunas tiendas naturistas. O MEJOR, COMAN MENOS CARNE (mejor pa tu salud) O MEJOR AUN, ¡DEJEN DE COMER CARNE YA DE UNA VEZ! Por favor, reenvien esta información. Este virus es una gran oportunidad para nosotros a influir en estos desgraciados de la industria cárinica que cambien la manera en que se produce la carne en el mundo, para el bienestar del medioambiente (ni empiezo a hablar del daño ecológico de las "granjas" industriales), los animales y nosotr@s seres humanos. NO PERMITAMOS QUE CAMBIEN EL NOMBRE Y FINGAN QUE NADIE SABE DE DONDE VINO ESTE VIRUS. granjas y ranchos tradicionales servían bien por milenios y ganaban perfectamente bien por la producción natural de carne. NO ES DEMASIADO TARDE PARA VOLVER. alemania ya lo está haciendo. todos los países lo deben hacer.Este correo no es un reenvío equis. Yo solita lo escribí. Si me quieren, ¡¡REENVIENLO!! Y ¡¡HAZ ALGO AL RESPECTO!!
Atte: Wendy Anne Eller de López
Mexico, D.F. 7 mayo 2009.
citas del artículo en inglés traducidos:"Científicamente este virus es porcino.""No importa cómo se llama, los expertos dicen que es casi 100% porcino. Mientras intentan quitar la "porcina" de la "influenza porcina", los expertos que investigan la herencia genética del virus dicen esto: Si genéticamente es principalmente porcino, y sus padres eran viruses porcinos, es influenza porcina." "Dr. Edwin D. Kilbourne, el inventor de la vacuna para la influenza porcina en 1976 y un profesor jubilado de la Universidad Médica de Nueva York en Valhalla dijo que la idea de cambiar el nombre es una posición absurda"Y el buen mexicano, negando al 100% el posible origen de las granjas industriales:"No creo que sea justo culparle a México por [el virus]. No se puede culparle a ningun país, no se puede culparle a ninguna persona o a ninguna institución. La recombinación de genes en el virus es algo que pasa naturalmente." - Miguel Angel Lezana, Epidemiólogo MexicanoNO ES ALGO QUE PASA NATURALMENTE, ESA MANERA DE PRODUCIR CARNE NO ES NADA NATURAL, Y SI SE PUEDE CULPAR A LA INSTITUCION DE LA CARNE. el virus nació en puercos mal criados. y tan-tan.El artículo de Mike Davis de La Jornada:Los cerdos peligrosos usan traje
Mike Davis*
Algunas farmacias del centro de la ciudad de México ofrecieron ayer cubrebocas y de inmediato se formaron largas filas para adquirir el productoFoto María Luisa Severiano
Las hordas de springbreakers regresaron este año de Cancún con un souvenir invisible, pero siniestro.
La influenza porcina mexicana, quimera genética probablemente concebida en las cloacas de algún chiquero industrial, de pronto amenaza con dar una fiebre al mundo entero. Los brotes iniciales en toda Norteamérica revelan una infección que ya se propaga a mayor velocidad que la más reciente cepa pandémica oficial, la influenza de Hong Kong de 1968.
Robando reflectores al asesino oficialmente designado, el H5N1 –que por lo demás muta con vigor–, este virus porcino es una amenaza de magnitud desconocida. Sin duda parece mucho más letal que el SARS en 2003, pero, siendo influenza, puede resultar más duradero que éste y menos proclive a volver a su cueva secreta.
Dado que las influenzas estacionales domesticadas del tipo A causan la muerte hasta a un millón de personas cada año, incluso un modesto incremento de la virulencia, en especial si se combina con alta incidencia, podría producir una carnicería semejante a la de una guerra en gran escala.
Entre tanto, una de las primeras víctimas ha sido la confortante fe, predicada durante mucho tiempo en los púlpitos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en que las pandemias pueden ser contenidas por las rápidas respuestas de las burocracias médicas, independientemente de la calidad de la salud pública local.
Desde las primeras muertes producidas por el H5N1 en Hong Kong, en 1997, la OMS, con el apoyo de la mayoría de los servicios nacionales de salud, ha promovido una estrategia centrada en identificar y aislar una cepa pandémica dentro del radio local del brote, seguida por una completa dosificación de la población con antivirales y vacunas (si las hay).
Un ejército de escépticos ha cuestionado con razón este enfoque de contrainsurgencia viral, pues sostienen que hoy día los microbios pueden viajar por el mundo (literalmente, en el caso de la gripe aviar) más aprisa de lo que los funcionarios de la OMS o locales pueden reaccionar al brote original. También apuntan al primitivo y a menudo inexistente seguimiento de la conexión entre las enfermedades humana y animal.
Pero la mitología de intervención audaz, preventiva (y barata) contra la gripe aviar ha sido invaluable para la causa de los países ricos, como Estados Unidos y Gran Bretaña, que prefieren invertir en sus propias líneas Maginot biológicas que incrementar dramáticamente la ayuda a las líneas frontales epidémicas fuera de su territorio, así como para las grandes trasnacionales farmacéuticas, que han combatido las demandas del tercer mundo por la manufactura pública y genérica de antivirales críticos, como el Tamiflu de Roche.
En todo caso, es probable que la influenza porcina muestre que la versión OMS/CDC de la preparación a una pandemia –sin una nueva y cuantiosa inversión en vigilancia, infraestructura científica y regulatoria, salud pública básica y acceso global a fármacos de vida o muerte– pertenece a la misma clase de manejo de riesgo piramidal que los derivados de AIG o los títulos de Madoff.
No es que el sistema de advertencia de pandemia haya fallado, sino que no existe, ni siquiera en Norteamérica y Estados Unidos.
Tal vez no sea sorprendente que México carezca tanto de la capacidad como de la voluntad política para dar seguimiento a la mortandad de ganado y sus impactos en la salud pública; pero la situación apenas si es mejor al norte de la frontera, donde la vigilancia es un pastiche disfuncional de jurisdicciones estatales y las trasnacionales productoras de ganado dispensan a las regulaciones de salud el mismo desprecio con que tratan a trabajadores y animales.
De manera similar, una década de advertencias urgentes de científicos en el campo no ha logrado asegurar la transferencia de tecnología avanzada de análisis viral a los países que están en la ruta directa de una probable pandemia. México cuenta con expertos de fama mundial en enfermedades, pero tuvo que mandar muestras a un laboratorio en Winnipeg (que tiene menos de 3 por ciento de la población de la ciudad de México) para identificar el genoma de la cepa. Por eso se perdió casi una semana.
Pero nadie estaba menos alerta que los legendarios controladores de enfermedades de Atlanta. Según el Washington Post, los CDC apenas se enteraron del brote seis días después de que el gobierno mexicano comenzó a imponer medidas de emergencia. De hecho, los funcionarios de salud pública de Estados Unidos aún están en gran parte a oscuras acerca de lo que ocurre en México, dos semanas después de que se reconoció el brote.
No debería haber excusas. No se trata de un cisne negro batiendo las alas. La paradoja central de este pánico por la influenza porcina es que, si bien fue totalmente inesperada, también se había vaticinado con precisión.
Hace seis años, Science dedicó una nota importante (reportada por la admirable Bernice Wuethrich) para probar que, luego de años de estabilidad, el virus de la influenza porcina norteamericana ha saltado hacia una vía rápida de evolución.
Desde que fue identificada, al principio de la gran depresión, la influencia porcina H1N1 sólo se había desviado ligeramente de su genoma original. Sin embargo, en 1998 se abrieron las puertas del infierno. Una cepa altamente patógena comenzó a diezmar la población de una granja porcina fabril en Carolina del Norte, y versiones nuevas y más virulentas comenzaron a aparecer casi cada año, entre ellas una extraña variante de H1N1 que contenía los genes internos del H3N2 (la otra influenza tipo A que circula entre humanos).
Investigadores entrevistados por Wuethrich se preocupaban de que uno de estos híbridos pudiera convertirse en influenza humana (se cree que las pandemias de 1957 y 1968 se originaron en la mezcla de virus aviar y humano en el cuerpo de cerdos) y llamaron a la creación de un sistema de vigilancia oficial sobre la influenza porcina: amonestación que, desde luego, pasó inadvertida en un Washington preparado para quemar miles de millones de dólares en fantasías de bioterrorismo mientras hacía caso omiso de peligros obvios.
Pero, ¿qué causó esta aceleración de la evolución de la influenza porcina? Probablemente lo mismo que ha favorecido la reproducción de la gripe aviar.
Desde hace mucho tiempo los virólogos creen que el sistema de agricultura intensiva del sur de China –una ecología inmensamente productiva de arroz, pescado, cerdos y aves domésticas y salvajes– es el motor principal de la mutación de la influenza, tanto la estacional como la genómica episódica. (Más raro es que se dé un salto directo de aves a cerdos y/o humanos, como ocurrió con el H5N1 en 1997.)
Sin embargo, la industrialización trasnacional de la producción ganadera ha quebrado el monopolio natural de China sobre la evolución de la influenza. Como muchos escritores han destacado, la crianza de animales ha sido transformada en décadas recientes en algo más parecido a la industria petroquímica que a la familia feliz de granjeros que presentan los libros de texto para niños.
Por ejemplo, en 1965 había 55 millones de cerdos en más de un millón de granjas de Estados Unidos; hoy existen 65 millones, concentrados en 65 mil instalaciones, la mitad de las cuales tienen más de 5 mil animales. En esencia, se trata de una transición desde los chiqueros a la antigua hacia vastos infiernos de excremento, de naturaleza sin precedente, en los cuales decenas, incluso cientos de miles de animales con sistemas inmunes debilitados se sofocan entre el calor y el estiércol e intercambian patógenos a velocidad de vértigo con sus compañeros de presidio y sus patéticas progenies.
Quien haya viajado por Tar Heel, en Carolina del Norte, o Milford, Utah –donde las subsidiarias de Smithfield Foods producen cada año más de un millón de cerdos por cabeza, así como cientos de pozas llenas de mierda tóxica–, entenderá por intuición hasta qué punto las agroindustrias han interferido con las leyes de la naturaleza.
El año pasado una distinguida comisión convocada por el Centro de Investigación Pew emitió un informe señero sobre la producción animal en las granjas industriales, el cual subrayaba el agudo peligro de que “el continuo reciclaje de virus… en grandes manadas o rebaños incrementará las oportunidades de generación de virus novedosos, mediante mutación o eventos recombinantes, que podrían propiciar una transmisión más eficaz de humano a humano”.
La comisión también advirtió que el uso promiscuo de antibióticos en fábricas de cerdos (alternativa más barata que sistemas de drenaje o ambientes más humanos) favorecía el aumento de infecciones por estafilococo dorado resistentes a los antibióticos, y que los lixiviados de los desagües producían brotes de pesadilla de E. coli y Pfisteria (el protozoario del día del juicio, que ha matado más de mil millones de peces en los estuarios de Carolina y enfermado a docenas de pescadores).
Sin embargo, cualquier intento de mejorar esta nueva ecología patógena tendría que enfrentarse al monstruoso poder ejercido por conglomerados ganaderos como Smithfield Foods (cerdo y res) y Tyson (pollo). Los comisionados del Centro Pew, encabezados por John Carlin, ex gobernador de Kansas, reportaron obstrucción sistemática de su investigación por las corporaciones, incluso con amenazas descaradas de retener financiamiento a investigadores.
Además, se trata de una industria altamente globalizada con equivalente peso político internacional. Así como el gigante del pollo Charoen Pokphand, con sede en Bangkok, logró suprimir investigaciones sobre su papel en la propagación de la gripe aviar por toda Asia, es probable que la prevista epidemiología del brote de influenza porcina se estrelle contra el valladar corporativo de la industria del cerdo.
Esto no quiere decir que jamás se encontrará una pistola humeante. Ya hay versiones en la prensa mexicana en torno a un epicentro de influenza alrededor de una gigantesca subsidiaria de Smithfield Foods en el estado de Veracruz. Pero lo que más importa (en especial dada la amenaza constante del H5N1) es la configuración mayor: la estrategia fallida de la OMS contra la pandemia, la ulterior declinación de la salud pública mundial, el férreo control de las grandes farmacéuticas sobre los medicamentos vitales, y la catástrofe planetaria de una producción ganadera industrializada y ecológicamente desordenada.
Traducción: Jorge Anaya
* Autor de los libros El monstruo llama a nuestra puerta, el cual trata sobre la amenaza de la fiebre aviar, Ciudad de cuarzo

Resultados Becas Nacionales y Becas Mixtas 2009

Los resultados finales de Becas Nacionales ya son conocidos por todos los interesados; por motivos históricos los consigno aquí.
En cuanto a los resultados de Becas Mixtas, no todos los interesados han establecido comunicación conmigo o sus coordinaciones para formalizar la asignación; CONACYT publicó sus resultados en este documento. Para más información al respecto, tenga la bondad de consultar la entrada previa en este su blog de confianza.